Mayores de 60 años: Los ancianos son más sensibles a los efectos adversos de los medicamentos, por lo que debe tener especial precaución si se encuentra en tratamiento con alprazolam. Consumo de alcohol: Evite el consumo de alcohol mientras está en tratamiento con este medicamento, ya que se aumentan los riesgos de efectos adversos, principalmente a nivel del sistema nervioso central (dificultad para concentrarse, depresión y otros). Manejo de vehículos: Este medicamento disminuye su estado de alerta y su capacidad de reaccionar frente a imprevistos, por lo tanto evite manejar vehículos, maquinaria peligrosa o realizar cualquier otra actividad de riesgo mientras se encuentre en tratamiento con este medicamento. Lactantes y niños: No se ha establecido la seguridad de este medicamento para ser utilizado en pacientes menores de 18 años. Los niños son más sensibles a los efectos adversos del medicamento. El uso de alprazolam en niños es posible solo en las condiciones determinadas por su pediatra. Este medicamento puede causarle sequedad de boca, lo que puede solucionar chupando caramelos. No debe interrumpir bruscamente el tratamiento, su médico le debe indicar la forma en que debe ir reduciendo la dosis a tomar. Se puede producir olvido de acontecimientos recientes por efecto de este medicamento. Nunca se deben tomar dosis mayores que las recomendadas por su médico.
Existen efectos que se presentan rara vez, pero son severos y en caso de presentarse debe acudir en forma inmediata al médico: dificultad de concentración, depresión, alucinaciones, disminución de la presión arterial, dolor muscular, rash, sequedad de garganta, fiebre, heridas o ulceras en garganta o boca, inusuales moretones o hemorragias, fatiga extrema, tinte amarillo en piel u ojos. Otros efectos: Pueden presentarse otros efectos que habitualmente no necesitan atención médica, los cuales pueden desaparecer durante el tratamiento, a medida que su cuerpo se adapta al medicamento. Sin embargo consulte a su médico si cualquiera de estos efectos persisten o se intensifican: somnolencia, confusión, mareos, sequedad de boca, vómitos, diarrea, estreñimiento, alteraciones del comportamiento, dolor de cabeza leve y olvido de acontecimientos recientes.